AHÍ QUEÓ por Francisco Pulido Acedo

Desde que oigo el ya famoso…. ahí queó..! En ese instante en el que todavía está tu cuerpo en un éxtasis voraz de lo que acaba de acontecer, esa larga espera de un año que haya sucedido tanto en tan pocas horas, me parece verdaderamente extraordinario que otra vez se haya producido el milagro de cada Miércoles Santo.

Y todo empieza en ese preciso momento ….ahí queó…!! Pistoletazo de salida de otro año cofrade, que en particular me gustaría ser mas participe.

…Ahí queó….! En su soledad todavía con olor a incienso, el aroma de claveles todavía húmedos, el olor a cera, esa mirada todavía perdida del nazareno que aún sostiene su cirio con su capirote apoyado en su hombro, pensando en esa ultima chicotá ya tradicional que les dedica el Señor de la Salud en boca de su capataz, que con su voz rota dicta desde su corazón, esta chicotá va por todos nuestros nazarenos con todas sus fatigas.

Que bonito poder rezar así, en ese momento te viene esa imagen del nazareno de su mirada de sufrimiento con el paso de las horas, de sus momentos de rezo, de que no puedo más pero no quiero que se acabe, de ese venirse arriba que ya se acaba… porque entiendo que en la Estación de Penitencia de un nazareno pasa por varios  estados de ánimo,  provocado por el paso de las horas, también pienso en la soledad del nazareno que lleva la Cruz de Guía escoltada por dos nazarenos que la van dando luz, o esos primeros tramos que solo tienen el consuelo de sus propios rezos que solo son recompensados en una chicotá, que valientes lo pienso y que orgullo mas grande.

Como retumba en mis oidos……ahí queó….

Ahí queó….con su mirada eterna
con su carita divina
con su Madre bendita
con su morada túnica
con sus manos ya cansadas
y sus heridas abiertas
Ahí queó…. Mi clavel
ya descansa Manué
en su iglesia del Carmen
ya se apagan las velas
que poquito te falta
ya se consume el miércoles
Tú solo en tu morada
Ahí queó….mi lucero del alba
metales por bulerías con sus cajas redoblan lloro
al compás de palmas rotas
Ahí queó….mi Gitano.

 

Tan sencillo y tan difícil a la vez contrapuntos de la vida, todavía me pregunto del porque soy costalero, que locura, te cansa, te hace daño, te sientes mal o sales de un ensayo y piensas que ya no hay más, que quieres parar y a la vez te dice tu capataz relevo y no quieres salir del paso, no te quieres mover, quieres ser como ese hermano nazareno que va dando luz a la cruz de guía, y no puede moverse de su fila, que curioso…. Ahí queó.

Erpuli.

 

 

Foto de Portada: COSTALEROS DE FE de Rodoldo Robledo. 25/01/2015.

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